Analizar los territorios sin incluir un indicador de proximidad a servicios básicos, es reconocer la desigualdad, sin relevar su importancia en la resolución de los problemas de salud, las siguientes líneas dan cuenta de ello y su importancia.
Según la superintendencia de Salud, las Garantías Explícitas en Salud (GES), constituyen un conjunto de beneficios garantizados por Ley para las personas afiliadas a Fonasa y a las Isapres. Parte de las Garantías exigibles son:
Acceso entendido como el “Derecho por Ley de la prestación de Salud” y oportunidad que son “tiempos máximos de espera para el otorgamiento de las prestaciones”. Tomaremos como referencia estos dos conceptos.
La legitimidad que las personas atribuyen a sus territorios, resignifica el espacio y la gestión de cómo también las agencias públicas, encontramos nuevas oportunidades y otorgamos un nuevo valor al significado de la proximidad espacial en la construcción de vínculos, la conformación de una estructura de oportunidades, la interacción y construcción de relaciones y por sobre todo en la Identificación del otro, como producción de un territorio común.
Las personas deberán integrarse a la urbe, al mismo tiempo de apropiarse de espacios, rutas y rutinas que constituyen su habitar. El territorio próximo es un soporte para las movilidades de las personas y su vida cotidiana.
La articulación social, lo relacional, los sistemas simbólicos e imaginarios, la raíz identitaria, todo lo que representa el hogar y la comunidad es lo que permite a las personas que habitan y viven los territorios, poder hacer frente a la falta de cohesión, la ausencia del Estado, y la entrega oportuna de atenciones de salud a las personas.
El índice de proximidad, relaciona el emplazamiento de los servicios públicos, de acuerdo a la distribución de la población y la distancia a la que se encuentran unos de otros.
Para efectos prácticos, se realiza el siguiente ejercicio:
Utilizando la Lista de Espera No GES de un Servicio de Salud, es posible distinguir comunas y zonas; en cada zona, se localiza un prestador de salud de Alta-mediana complejidad, el que permite identificar cuáles son los problemas de salud en espera que se podrían resolver en el establecimiento y de qué lugares provienen. Al identificar estos puntos, se estableció una distribución de curva normal para identificar el promedio de días de espera de este grupo, la mediana y el percentil 99 de las personas que más esperan una atención.
Por otro lado, a partir de la identificación de las personas que componen el percentil 99 (aquellas personas que más están esperando) se distinguió el acceso a la prestación, de la proximidad de la persona para resolverla. El resultado de este ejercicio (percentil 99), identificó alrededor de 60 mujeres, adultas mayores, de zona rural fuera de un anillo concéntrico próximo a un establecimiento de salud resolutor, que estaban a la espera de una prestación ginecológica. Ello sugiere la pertenencia de analizar con enfoque de género y derechos, la Lista de Espera, principalmente en patologías que afectan más a ciertos grupos etarios en donde la pesquisa oportuna es clave en el curso de los diagnósticos.
A través de este ejercicio se pueden realizar algunas reflexiones:
- Las personas que menos tiempo esperan, viven en un anillo concéntrico próximo al establecimiento resolutor.
- Dos personas pueden estar esperando la misma prestación, pero la probabilidad de atención de quien vive más cerca del anillo concéntrico al establecimiento, es mayor.
- La proximidad es un factor que incide en la resolución oportuna de prestaciones de una persona. En la medida que las personas viven en territorios más alejados, mayor es el tiempo de espera y por lo tanto aumenta la brecha de resolutividad.
- Esto se complejiza si distinguimos variables como: ruralidad, aislamiento, género, etc.
- Considerar la proximidad en la gestión de la Lista de Espera (y también en el acceso a consultas de especialidad), exige construir relatos territoriales (proto territorios) en base a variables provistas de significado y legitimidad para cada zona, que puedan explicar la incidencia de factores en el territorio para la resolución de la Lista de Espera.
- La disminución del percentil 99, reduce inmediatamente el promedio de días de espera y la mediana.
- Es pertinente y necesario analizar con enfoque de género y Derechos Humanos la gestión en los territorios.
- Los modelos de análisis de territoriales, nos acercan a la pesquisa oportuna, el diagnóstico adecuado y la gestión efectiva de los problemas de salud de las personas.
El ejercicio teórico práctico, cobra fuerza y relevancia cuando en definitiva, la persona es el principal beneficiario. El trabajo multidisciplinario, construir evidencia y articular argumentos lógicos, permite hacer convivir el acceso, la oportunidad y la proximidad, en virtud, de mejorar la gestión de los problemas de salud de las personas y hacer crecer el bien común.